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Asegurar las relaciones con tus clientes y proveedores
Si disponemos de un abogado en nuestro entorno, nos podrá recomendar cuáles son las cláusulas que debemos incluir en los contratos que firmemos tanto con clientes como con proveedores. Estas pueden sernos de gran utilidad para prevenir futuros malentendidos, si acordamos una mediación de conflicto indicándolo como una cláusula de nuestro contrato nos ahorraremos un posible juicio, con los gastos y las incomodidades que esto conlleva.
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Impagos y morosos
Es uno de los mayores problemas a los que se enfrenta la empresa, tanto Pymes como grandes empresas sufren morosidad y esto conlleva un impacto importante en el bienestar de la empresa. Tener un abogado que te asesore en los detalles que pueden hacer qué la morosidad se prevenga, gestionando de manera eficiente la documentación que se necesita cuando se vende, o cuando se realiza un proyecto: solicitudes de aceptación, documentación de entrega del producto con un albarán, requerimientos de los presupuestos, facturas con todos los requisitos legales,…
Y en el caso de que la empresa se enfrente a algún impago, se requiere de un abogado para que se reclamen las cantidades de forma eficiente.
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Privacidad y uso de datos de tus clientes
Es muy importante tener en cuenta este aspecto, el uso de mails, o teléfonos de tus clientes con fines comerciales puede suponer una multa, si no cuentas con el consentimiento de éstos. La Agencia Española de Protección de Datos por incumplir esta ley puede sancionar a la empresa con multas que van de los 900 hasta los 600.000€. Esto se soluciona contando con un profesional experto que redacte el aviso legal y la protección de datos de la empresa, asesorándote en todo momento y previniéndote de cualquier situación que puede generar un conflicto con esta ley.
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Contratos de trabajadores
Si necesitas ampliar la plantilla, debes estar informado sobre todos los modelos de contratación que hay disponibles hoy en día, posibilidades de jornadas de trabajo, salarios, flexibilidad de los despidos. Es conveniente un buen asesoramiento profesional que te indique cuál es el tipo de contratación que más te beneficia teniendo en cuenta tu situación.
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Protección de tu patrimonio personal
La ley de Sociedades capitales, puede llevar al administrador de una sociedad a responder ante ésta con su patrimonio personal, si se da una mala gestión de la misma el administrador puede verse envuelto en una desagradable situación e incluso puede darse la in habilitación del cargo, no pudiendo volver a ser administrador. Si dentro de la administración de la empresa se cuenta con un abogado los miembros del consejo serán mucho más conscientes de estas situaciones. Ya que en muchos casos se desconoce esta norma.
